Sacarle el máximo partido al pasillo

Por sus función, el pasillo es una pieza de la vivienda larga y estrecha. Ya que arquitectónicamente el único empleo que se ha pensado para el pasillo, es el de servir de zona de paso y de acceso a las distintas salas de una casa, se intenta reducir su espacio al máximo, lo que tiene sus ventajas y sus desventajas.

Un pasillo estrecho significa más espacio para otras habitaciones, algo importante cuando los metros se han de luchar. Pero un pasillo demasiado estrecho, también significa como poco, un metro desperdiciado como espacio aprovechable de forma real. Por eso, si podemos elegir, escogeremos siempre la vivienda con menos metros de pasillo, sobre todo hablando de metros a lo largo. Un pasillo ancho, aunque pasillo sea, se podrá aprovechar como espacio de almacenaje y orden.

¿Qué hacer y qué no hacer en un pasillo?

EL PASILLO COMO ZONA DE PASO.

Esta claro que el pasillo es zona de paso y como tal debemos tratarlo. Por ello, a la hora de pensar en la decoración del pasillo, debemos tener siempre presente que debe estar despejado y que atravesarlo debe ser cómodo.

Eso no quiere decir que en algunos pasillo, podamos incluir muebles de poca profundidad.

Consolas, estanterías, zapateros o percheros, son piezas de mobiliario, perfectas para un pasillo.

Sobre otros elementos puramente decorativos que podemos utilizar en un pasillo, serán útiles espejos, molduras o incluso pintura, papel de pared u otros cubrimientos. Todos ellos nos pueden ayudar a crear efectos visuales interesantes en un pasillo.

UN PASILLO DEMASIADO LARGO.

Uno de los problemas más comunes en un pasillo, se encuentra cuando este es demasiado largo.

Para acortar un pasillo con esta característica, será útil colocar un zócalo a media altura. Un punto focal al fondo del pasillo, como un mueble o un color creado con pintura o papel pintado, nos ayudará a acortarlo visualmente. 

Cuadros, fotografias o adornos en las paredes también serán buenos recursos para solucionar decorativamente, un pasillo demasiado largo.

UN PASILLO ANCHO.

Un pasillo ancho es quizá el sueño de toda vivienda con pasillo. 

Si es suficientemente ancho, aunque tampoco necesitamos que sea un hall, podremos además de colocar como recomendábamos al principio muebles de poca profundidad, otros muebles más hondos.

En pasillos anchos y si tenemos la posibilidad, será perfecto mandar hacer armarios a medida para diferentes partes del pasillo o incluso a lo largo de este. De esta forma, dejando el pasillo con la anchura justa para el paso, ganaremos un espacio de almacenaje extra muy aprovechable.

UN PASILLO CON TECHO ALTO.

Si tu pasillo tiene un techo alto, no te lo pienses y coloca altillos. 
Además de que estéticamente ganarás disminuyendo la altura del techo en tu pasillo, ganarás espacio de almacén y habrás aprovechado una zona de paso que de otra manera quedaría fría y desperdiciada.

UN PASILLO MUY PEQUEÑO.
Para un pasillo pequeño no hay solución para aprovecharlo.

Ya sea por demasiado estrecho como por demasiado corto, olvídate de colocar muebles en un pasillo con estas características.

Incluso los elementos decorativos en un pasillo pequeño, deben reducirse al mínimo.

Si se quiere agrandar el pasillo, podremos engañar al ojo si pintamos de un solo color paredes e incluso puertas y si ese color es tan claro como el blanco.



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